
Tras un trabajo colaborativo con la Fundación Alto Río, de Concepción, y los profesionales de Aprende Resiliencia, se logró materializar una cápsula sobre las nociones básicas del voluntariado espontáneo.
“¿Cómo nos organizamos ante un desastre en las escuelas o en la universidad?” Es el nombre del nuevo material disponible en la web de Aprende Resiliencia (www.aprenderesiliencia.cl) el cual trata sobre la gestión del voluntariado espontáneo, iniciativa promovida por la Fundación Alto Río (www.fundacionaltorio.cl).
La cápsula busca analizar y debatir en las salas de clases y universidades sobre el desafío que tiene el país de generar acciones en materia de reducción de riesgos de desastres y estrategias preventivas y reactivas que permitan generar una respuesta oportuna y eficaz frente a desastres de origen natural o antrópico, que puedan afectar el entorno tanto educativo como familiar de los estudiantes.
Esta herramienta fue diseñada para trabajar tanto con los estudiantes de enseñanza media como con los estudiantes de pregrado qué es y cómo funciona la gestión del voluntariado espontáneo en situaciones de desastre y catástrofe, y cómo se deben organizar y capacitar para actuar de manera adecuada frente a una crisis que supere las capacidades locales de respuesta, sin exponerse tanto a daños físicos como emocionales o interferir en las operaciones de respuesta frente al acontecimiento.
La cápsula se basó en la “Guía de orientaciones para la gestión de voluntarios espontáneos en situaciones de emergencia y desastre”, la que en palabras de Mónica Molina, presidenta de Fundación Alto Río, nace como producto del trabajo colaborativo de varias instituciones y organizaciones en una convocatoria realizada por la Dirección de Protección Civil y Emergencia de la Gobernación Provincial de Concepción. La Mesa Intersectorial funcionó durante el 2018 con 18 representantes de organizaciones que desarrollaban actividades vinculadas a la reducción del riesgo de desastres y/o la gestión de voluntariado en la Provincia.

Dentro de la cápsula también se enseña lo que es el Centro de Recepción de Voluntariado Espontáneo (CRVE) y sus características, las diferencias entre una emergencia y una catástrofe, junto a la Guía de orientaciones para la gestión de voluntarios espontáneos en situaciones de emergencia y desastre, creada en el 2018 por profesionales de la Universidad de Manchester, la Gobernación Provincial de Concepción, la Municipalidad de Talcahuano y Onemi.
Pas Toledo, jefa del Proyecto Aprende Resiliencia, expresó que el trabajo colaborativo realizado con la Fundación Alto Río da el primer paso para seguir colaborando con las organizaciones del Consejo de la Sociedad Civil de Itrend; “creemos que poder materializar los trabajos y estudios que realiza cada una de las ONG’s que trabajan con nosotros es un aporte no solo a crear un país más resiliente ante desastres, sino que también contribuye a la creación de conciencia por parte de las comunidades educativas”.
La profesional destacó que poder transformar contenidos técnicos en material educativo para diversos cursos es un aporte y espera que otras organizaciones y centros de investigación se sumen a esta iniciativa.
Mónica Molina, expresó que conocer este tipo de voluntariado es importante “porque el voluntariado espontáneo debe ejercerse de manera responsable y segura, bajo orientaciones claras que permitan generar ayudas efectivas, en vez de nuevas víctimas, más daño a los damnificados o perturbaciones al trabajo de respuesta que se está realizando”. “Es necesario ajustar las expectativas de los que coordinan el trabajo voluntario y del voluntariado mismo, para que se realicen las tareas que realmente son necesarias y no las que nosotros queremos hacer”, puntualizó.
Puedes revisar la cápsula en el siguiente enlace.